¡Te amo! Le dice con voz
quebrada en toda su rudeza,
sus ojos conjugan retenidas làgrimas
y el llanto que ahoga oprime su alma
Al cuerpo se aferra, no quiere soltarlo.
menudo, fràgil,...ligero,
en su sueño ùltimo acompaña
De besos lo cubre,cual tibia mortaja
Recuerda su risa,de edad tierna
ofreciendo amorosos abrazos,
con besos de fresca inocencia
Sus oraciones cortas llenas de algarabia
colmando el espacio que los reunia
se ha dormido junto con su lejanìa
Un grito ensordecedor
resuena con eco de dolor
ensordeciendo el silencio
en fuerte proclama.
¡Te amo, te amo, te amo!....
El solloso acude desbordado
aflorando su sentir enlutado,
por la partida de la vida
que acunada en sus brazos
habìa dormitado.
El viento,esparce su gemir
y la vespertina oidos le presta
en la ocasiòn que muestra
visiòn de innegable tristeza.
Autor: Regina Fuentes